Flaneur: El paseante a la deriva urbana
Observador solitario del ambiente urbano, redescubre espacios olvidados, va a la deriva, una nueva forma de sentir el mundo alrededor.
Concepto: El otro lado.
El Porqué: Este concepto nace de la necesidad de descubrir el otro lado del transporte urbano, de buscar una forma diferente de ver y sentir el ambiente que me lleva todos los días al trabajo. Crear, explorar e imaginar por unos minutos. Trataré de inventar un nuevo mundo siendo una paseante a la deriva urbana.
El Cómo: Asumiré el papel del conductor del bus, escogeré aleatoriamente una persona que suba al transporte y tomaré un registro de su vida en ese instante, analógicamente sera como tomar una fotografía y percibir qué hay al otro lado de ésta, todo esto para imaginar y contar una breve historia de su vida cotidiana antes de llegar al bus.
El Dónde: En el bus que me transporta diariamente a mi sitio de trabajo. Ruta Avenida 68.
Personaje: Hombre / 35 años
Descripción: Alto, flaco, con corbata azul clara (trabaja en un banco), serio y con cara de desvelado (tiene ojeras). Lleva papeles al parecer muy importantes en una carpeta negra.
Percepción (el otro lado): Su día comenzó muy temprano, trabaja al otro extremo de la ciudad, se levanta apurado tiene que entregar un proyecto de trabajo muy importante, por eso la pinta de ahí se define su ascenso a director de presupuestos. No pasó una buena noche ya que se desveló un poco, se la pasó escribiendo una carta a su novia es el único método que encontró para terminarle, no se la aguanta ni un día más. Durmió 3 horas y en la ducha seguía analizando el cómo terminar la carta para dar con la ruptura definitiva de una relación de 5 años, al mismo tiempo pensaba en como presentar su proyecto, cómo se vestiría para la ocasión, si de verde o azul. Alcanzó a tomarse un café y escribía, Antonia no sos vos soy yo, por acelerado y descuidado se impregna el papel de café, lo limpia rápidamente pero se ve claramente la mancha, trata de sercarla con el secador de la hermana, pero hace que se note más oscura, las líneas se han borrado, y ya está tarde, pero no le importa, igual la mete dentro de un sobre, no tiene tiempo de leer qué pedazo se borró, la guarda dentro de la carpeta negra junto a su proyecto de trabajo. Sale a coger el bus, va tarde así que coge otra ruta para llegar más rápido, y así me lo encuentro, preocupado, desvelado y distraído, pues se le cae precisamente la carta para Antonia.
